Ayuda a los alumnos con pérdida auditiva en el acceso a la comunicación:
El papel del profesor encargado de la biblioteca
Melissa Griswold, Clarke Mainstream News, 2011: Vol. 31, no. 2.
Existen numerosas situaciones fuera del aula en la que habitualmente trabaja el alumno, en las que éste también tiene que establecer redes tanto a nivel académico como social. En el caso de un alumno con una pérdida auditiva total o parcial, la posibilidad de acceder a la comunicación en estas situaciones repercute en gran medida en sus posibilidades de participar y así desarrollar un sentido de pertenencia a la comunidad escolar. En el boletín de septiembre/octubre, (Vol VI, nº 1) ofrecimos algunos consejos para supervisar y facilitar la comunicación durante el tiempo de comedor y en el recreo. En éste abordaremos las experiencias en los periodos de estancia en la biblioteca del colegio.
Los profesores encargados de la biblioteca tienen una oportunidad única de contribuir al progreso de los alumnos en el terreno académico y social. Ayudan a los alumnos a ampliar sus conocimientos sobre el mundo, despiertan su imaginación a través de la narración de textos, desarrollan su vocabulario, enseñan y modelan las destrezas necesarias para que el alumno busque la información por sí solo y mucho más. Es importante considerar el papel del profesor encargado de la biblioteca en su papel de docente e incidir en la repercusión que potencialmente puede tener la pérdida auditiva en la capacidad del alumno para seguir con normalidad las actividades de la biblioteca y participar en ellas. Con estas premisas, los profesores encargados de la biblioteca pueden conseguir que el alumno con pérdida auditiva no pierda el hilo del relato o la información que se presenta o el debate que se lleva a cabo en el tiempo de estancia en la biblioteca. Hemos colaborado con la profesora encargada de la biblioteca Jenny Kate Marble de Clarke School, que cuenta con experiencia tanto en Clarke (colegio específico para alumnos sordos) como en entornos del sistema educativo ordinario, con el fin de ofrecer sugerencias a los profesores que trabajen en la biblioteca con los alumnos con pérdida auditiva durante este curso.
“Utilizo el sistema FM constantemente. Me da seguridad saber que mis alumnos me pueden escuchar y pueden participar”.
Jenny Kate Marble,
Bibliotecaria de Clarke School
Acceso a la información en el tiempo de biblioteca
Al igual que en el aula, tenga en cuenta el entorno físico y la manera de facilitar un acceso óptimo a la información auditiva y visual.
• Utilice el sistema de FM personal del alumno. El sistema de FM se puede utilizar en la lectura en voz alta, en los debates o en la presentación de trabajos tanto cuando se hace con toda la clase como en un grupo pequeño. También puede ser apropiado para trabajar de manera individual con el alumno, en función de sus necesidades y preferencias, y en las situaciones en que el ruido de fondo procedente de otros grupos o una acústica deficiente hagan difícil la escucha. El profesor deberá conocer la manera de apagar o silenciar el micrófono de FM. Necesitará silenciarlo una vez que finalice la tarea de grupo y esté trabajando con otros alumnos, para que el alumno con pérdida auditiva no se vea bombardeado con conversaciones de las que no forma parte.
• Designe un lugar para la actividad de lectura en voz alta en grupo. Busque un lugar desde el que no se moleste a otros alumnos que estén utilizando la biblioteca al mismo tiempo, por ejemplo, un rincón acogedor rodeado de estanterías.
• Asigne asientos preferentes. Hable con el alumno, el tutor del aula o el profesor de audición y lenguaje para ver cuál sería la mejor disposición para sentar a los alumnos en el espacio disponible, sin olvidar un lugar concreto para el alumno con deficiencia auditiva.
• Cuando lea en voz alta, no olvide que el libro que sostiene no debe taparle la boca. Es importante que el alumno vea su rostro con claridad. Cuando desee enseñar una imagen, deténgase y no siga leyendo hasta mostrarla al grupo. De esta manera, el niño no se perderá parte del relato cuando centre su mirada a la imagen.
• Para conseguir que haya el menor ruido de fondo posible, no programe visitas de otros grupos en el mismo periodo de tiempo en que el niño con pérdida auditiva pueda encontrarse en la biblioteca. Esto puede ser más factible en los niveles de infantil y primaria cuando toda la clase se traslada a la biblioteca, en lugar de hacerlo individualmente o en pequeños grupos.
• Utilice soportes visuales variados. Se puede emplear un rotafolio o una hoja grande para resaltar el vocabulario clave, los puntos que se desea destacar durante un relato o una lección, el programa o la agenda de las actividades que se van a realizar, las normas a tener en cuenta durante la estancia en la biblioteca, etc. Imprima imágenes que consiga en Internet, utilice libros de consulta (para mostrar imágenes reales del animal que aparecerá en el relato, por ejemplo) o presente objetos reales que permitan incrementar el vocabulario que vaya apareciendo en el relato. Emplee un globo terráqueo o un mapa para mostrar a los alumnos el lugar donde transcurre el relato. En el caso de los alumnos más mayores, la tecnología puede ser de gran ayuda. Considere la utilización de PowerPoint para presentar la información de una manera organizada. Imprima copias de la presentación de PowerPoint para los alumnos. Utilice una pizarra digital interactiva para presentar el catálogo de libros de la biblioteca y para enseñar a los alumnos la manera de realizar una búsqueda de libros.
• Facilite al alumno material impreso. Si los alumnos pequeños tiene que cantar o repetir rimas como parte la lectura voz alta, no olvide realizar copias del texto y facilitárselas a los alumnos y al profesor. Otra alternativa sería presentar el texto en una hoja grande de papel.
Estrategias de enseñanza
Reflexionando sobre su experiencia como bibliotecaria en un colegio público, Jenny Kate hace hincapié en que las estrategias que ella actualmente considera esenciales para los alumnos con pérdida auditiva son las que utiliza con el resto de los alumnos del sistema educativo ordinario. Tomar conciencia de la posible repercusión de la pérdida auditiva, enriquecerá la narración de un relato o aportará una mayor claridad a todos los alumnos en el proceso de búsqueda de libros, al mismo tiempo que facilita el acceso a la información al alumno con una pérdida auditiva total o parcial.
• No se debe dar por hecho que el alumno conoce el vocabulario, el lugar o las experiencias que aparecerán en un relato. Busque la manera de conectar el relato con diferentes recursos (como los recursos visuales anteriormente descritos) y experiencias. Por ejemplo, para la lectura de un relato en el que se hacía referencia a la música de ópera, Jenny Kate localizó una emisora de ópera on-line que pudieron escuchar los alumnos. De esta forma, les ofreció una experiencia relacionada con lo que sucedía en el relato.
• Cree una imagen mental del relato. Presente un relato ofreciendo en primer lugar parte del vocabulario y un esquema, para que los alumnos tengan una imagen mental de éste y puedan comprenderlo con más facilidad. “Cuanto más cercano se haga un relato, más divertido y mágico será para los alumnos”, asegura Jenny Kate.
• Cuando lea en voz alta, vaya más despacio y emplee diferente entonación. Jenny Kate lo incorpora en la lectura en voz alta de una forma natural, dando a menudo sinónimos o aclaraciones adicionales sobre el vocabulario o los conceptos que los alumnos puedan desconocer sin interrumpir el hilo del relato.
• Deténgase de vez en cuando para comprobar que los alumnos están comprendiendo: Invitar a los alumnos a que cuenten, con sus propias palabras, lo que está sucediendo en el relato es una manera excelente de comprobar el grado de comprensión y es más eficaz que realizar preguntas cuyas respuestas son sí/no, como por ejemplo, “¿habéis entendido?” o “¿me escucháis bien?”. Un alumno puede responder con facilidad, “sí”, pero es posible que no haya escuchado bien o malinterpretado partes del relato.
• Repita o reformule las preguntas y los comentarios de los otros alumnos. La comprensión de las respuestas de otros compañeros que pueden estar situados más lejos, donde la lectura labial no es fácil, o de compañeros que hablan bajo o vocalizan poco puede resultar bastante complicado.
• Cuando se trata de ayudar a alumnos más mayores en la búsqueda de libros, es preciso que las indicaciones estén orientadas a los alumnos. Anime al alumno a que explique qué es lo que está buscando. Ayúdele a que sea él quien resuelva el problema en lugar de darle el trabajo hecho. Por ejemplo, es posible que el alumno no conozca los términos más precisos para realizar una búsqueda en Internet. Se puede guiar al alumno en la búsqueda de categorías más amplias o más específicas (por ejemplo, “Parece que has encontrado demasiadas opciones. ¿Hay alguna manera de que podamos delimitar más la búsqueda?”). Si el alumno encuentra un recurso que es útil, muéstrele los temas que componen el libro y la manera de utilizarlos como términos de búsqueda para encontrar recursos similares.
• Refuerce el vocabulario. Los alumnos con pérdida auditiva pueden estar menos familiarizados con el vocabulario específico para todo lo relacionado con la biblioteca y les puede resultar de gran ayuda conocer esta terminología. Facilite folletos o listas de vocabulario al tutor, el personal de apoyo y a los padres.
• Fomente el uso de las colecciones de las bibliotecas públicas. Con frecuencia, Jenny Kate percibe que la enseñanza individual o en pequeños grupos del proceso de búsqueda es una buena oportunidad para que los alumnos mayores aprendan la forma de acceder a las colecciones de las bibliotecas públicas y se sientan cómodos con el proceso de búsqueda y solicitud de materiales a través del préstamo entre bibliotecas. Tampoco en este caso se debe dar por hecho que los alumnos están familiarizados con el proceso o con el vocabulario relacionado.
• Conozca el nivel de lectura del alumno. Si consulta con su profesor, podrá orientar al alumno hacia los libros que mejor se adapten a sus intereses y su nivel de lectura.
Colaboración con los profesores y el personal de apoyo
Es obvio que el profesor encargado de la biblioteca desempeña un papel clave a la hora de reforzar y ampliar el aprendizaje que está teniendo lugar en el aula. Si está al tanto del temario escolar, puede seleccionar libros para leer que contengan información relacionada con lo que los alumnos están aprendiendo en clase aunque de una forma diferente. Para los alumnos con pérdida auditiva, en especial, es una gran ayuda la exposición al contenido y al vocabulario que van apareciendo a lo largo de la jornada escolar desde diferentes perspectivas. Los relatos y las canciones, o los pasos a seguir en la búsqueda de libros y el vocabulario relacionado, que se presenta en los periodos de biblioteca se pueden utilizar en las sesiones individuales con el logopeda o con el profesor itinerante de sordos. Del mismo modo, Jenny Kate anima a los profesores encargados de biblioteca a estar abiertos a las oportunidades de reforzar las habilidades específicas en las que un niño esté trabajando: “Si tengo previsto incorporar una canción en una sesión con alumnos pequeños, ¿por qué no seleccionar una canción que refuerce las habilidades de articulación con las que el alumno está trabajando?”.
La biblioteca es un lugar muy especial para todos los alumnos, para los mayores y también para los pequeños. Deseamos que todos los alumnos pequeños se sientan atraídos por las sesiones en las que se narra un relato, que sean capaces de comprenderlos y de participar activamente. A medida que los alumnos pasan de curso, es importante que los alumnos aprendan a utilizar los recursos de una biblioteca de una manera eficaz. Los alumnos con pérdida auditiva pueden necesitar alguna ayuda adicional y sacarán el máximo partido a su paso por la biblioteca si cuentan con la cooperación del profesor encargado de la biblioteca que comprende las estrategias que facilitan el acceso a la información y su comprensión y que colabora como un miembro del equipo de apoyo del alumno.
Consejos para oír bien: Lo que se debe y no se debe hacer con los micrófonos de FM
Clarke Mainstream News, 2011: Vol. 31, no. 2.
Un sistema inalámbrico personal de FM facilita el acceso a la comunicación en diferentes situaciones de aprendizaje durante la jornada escolar. Con un mecanismo similar al de una pequeña emisora de radio, el sistema de FM permite a un alumno con pérdida auditiva escuchar mejor lo que dice el profesor al contrarrestar los efectos de la distancia, el ruido de fondo del aula y la reverberación. Un sistema de FM se compone de dos elementos básicos: el transmisor/micrófono del profesor y el receptor del alumno (que se conecta a sus audífonos o implante coclear). Cuando está activado, el micrófono capta la voz del profesor y la transmite directamente al receptor del alumno. De esta manera, la voz del profesor supera en intensidad a los ruidos circundantes. Generalmente supone una ganancia significativa en la capacidad del alumno de entender lo que dice el profesor.
Es esencial que el micrófono de FM se sitúe convenientemente y se utilice de una manera adecuada para lograr que el alumno reciba una señal óptima y tenga buena disposición para utilizarlo en el entorno escolar. En este artículo, los audiólogos de Clarke nos ayudan a explicar lo que se debe y no se debe hacer con los micrófonos de FM. Se debe tener en cuenta que existe una gran variedad de sistemas de FM en el mercado y que las características pueden variar en función del modelo. La siguiente información se refiere a tres tipos de micrófonos: los que están integrados o incorporados en el transmisor de FM, los que se conectan al transmisor de FM (micrófonos de solapa y diadema) y los de mano, que se utilizan como segundo micrófono para pasarlo de una persona a otra. Como siempre, se debe consultar al audiólogo del alumno las cuestiones relativas a las características específicas del equipo que éste utilice.
¿Silenciar el micrófono o no silenciarlo?
Además de utilizar adecuadamente el micrófono, es igualmente importante saber cuándo el micrófono debe estar encendido y cuando se debe silenciar. Si el sistema de FM del alumno no dispone de una función de silencio, lo que hay que hacer es apagar el transmisor llegado el momento. Si el sistema de FM dispone de una función de silencio, es preferible utilizarla que apagar el dispositivo.
Se debe silenciar el micrófono de FM cuando:
• se mantenga una conversación privada con otro profesor, adulto o alumno
• se trabaje con otro alumno o un grupo de alumnos en el que no participe el alumno con pérdida auditiva
• el transmisor/micrófono pase de un profesor a otro
• cuando acuda al aseo
• se mantenga una conversación telefónica
La manera en que un profesor utiliza el micrófono de FM influye decisivamente en los beneficios que tendrá para el alumno. Mantener una actitud positiva, acordarse de silenciar el micrófono cuando sea necesario y colocarlo correctamente es una forma de ayudar a que el alumno se sienta cómodo a la hora de utilizar el sistema de FM en el entorno escolar. Estas buenas prácticas se deben enseñar también a los compañeros de clase del alumno. En el transcurso de la ajetreada jornada, podemos suponer que no existe ningún problema en la forma en que un profesor o un compañero se coloca el micrófono de FM, si el alumno con pérdida auditiva no lo menciona. Hay que recordar que es posible que el alumno no desee llamar la atención sobre un problema y “corregir” a un profesor o un compañero o que simplemente no se de cuenta de que se puede mejorar la calidad de la audición con unos pequeños ajustes. Con el fin de fomentar una utilización apropiada y sistemática, recomendamos a los colegios a que compartan “lo que se debe y no se debe hacer” con los micrófonos de FM con todas las personas que vayan a utilizar el sistema de FM.
Recopilado por Melissa Griswold, MED, con un agradecimiento especial a las audiólogas del Centro de audición de Clarke, Dra. Kathryn Girardin, directora, y Dras. Christine Kelley, Joni Skinner, Amy Catanzaro y Emily Bambacus.
La manera en que un profesor utiliza el micrófono de FM influye decisivamente en los beneficios que tendrá para el alumno. Mantener una actitud positiva, acordarse de silenciar el micrófono cuando sea necesario y colocarlo correctamente es una forma de ayudar a que el alumno se sienta cómodo a la hora de utilizar el sistema de FM en el entorno escolar. Estas buenas prácticas se deben enseñar también a los compañeros de clase del alumno. En el transcurso de la ajetreada jornada, podemos suponer que no existe ningún problema en la forma en que un profesor o un compañero se coloca el micrófono de FM, si el alumno con pérdida auditiva no lo menciona. Hay que recordar que es posible que el alumno no desee llamar la atención sobre un problema y “corregir” a un profesor o un compañero o que simplemente no se de cuenta de que se puede mejorar la calidad de la audición con unos pequeños ajustes. Con el fin de fomentar una utilización apropiada y sistemática, recomendamos a los colegios a que compartan “lo que se debe y no se debe hacer” con los micrófonos de FM con todas las personas que vayan a utilizar el sistema de FM.
Recopilado por Melissa Griswold, MED, con un agradecimiento especial a las audiólogas del Centro de audición de Clarke, Dra. Kathryn Girardin, directora, y Dras. Christine Kelley, Joni Skinner, Amy Catanzaro y Emily Bambacus.
Siguiendo la corriente: Siguiendo la carrera profesional: adultos con pérdida auditiva en el mundo laboral. Parte II
Se trata de un trabajo en el que no todo es un camino de rosas y que te ofrece la oportunidad de participar en experiencias que te cambian la forma de ver la vida.
Eres testigo de lo que sucede y además en el camino haces buenos amigos.
Cara Frank,
COORDINADORA DE GRUPOS Y LOGÍSTICA EN EL CENTRO DE DEPORTES ADAPTADOS, CRESTED BUTTE, COLORADO
¿Preferiría el adolescente con pérdida auditiva con el que vivimos o con el que trabajamos estar al aire libre, escalando, practicando el ciclismo o navegando en kayak, que trabajar sentado en una oficina? Si fuera el caso, no se olvide de hablarle de Cara Frank. Como coordinadora de grupos y logística del Centro de Deportes Adaptados (The Adaptive Sports Center) en Crested Butte, Colorado, Cara ha encontrado la manera de vincular tres de sus grandes pasiones en una profesión: su amor por la naturaleza, su inclinación por el deporte y su deseo de facilitar que otras personas, en particular aquellas que se encuentran en circunstancias difíciles, puedan experimentar la vida en comunidad y el empoderamiento. El Centro de Deportes Adaptados es una organización sin ánimo de lucro que ofrece durante todo el año actividades recreativas a personas con discapacidad y a sus familias.
Cara presenta nació en Boulder, Colorado, en 1984, presenta una pérdida auditiva profunda congénita y creció en Oregón. Esta pérdida no se le diagnosticó hasta que tenía dos años, aunque sus padres eran conscientes de que “algo no marchaba bien”. Tiene un hermano más pequeño y es la única persona en su familia que padece una pérdida auditiva. Empezó a utilizar audífonos, asistió a un colegio oralista para alumnos con pérdida auditiva, le pusieron su primer implante coclear a los cinco años y se incorporó al sistema educativo ordinario en segundo curso. Hace dos años que lleva un implante coclear bilateral y, en su tiempo libre, se dedica a ejercitar lo que ella llama su “nuevo oído”.
Tras iniciar la licenciatura en Historia del Arte en la Universidad de California (CSUN, California State University de Northridge), Cara se dio cuenta de que el arte era para ella más un pasatiempo que la posibilidad de una carrera profesional. Un compañero le habló de que podía especializarse en Parques, Recreación y Ocio. Cara pensó: “¡Me viene como anillo al dedo!”. Cara había crecido en una familia de deportistas que, con frecuencia, dedicaba los fines de semana a practicar senderismo, camping o navegación, y su padre era un extraordinario entrenador. Cara también menciona a entrenadores y profesores de educación física que ejercieron una gran influencia en sus aficiones, incluido un orientador de campamento con pérdida auditiva que “me enseñó que la comunicación tiene que fluir en ambas direcciones”. Después de estudiar dos cursos en la CSUN (Universidad de California), Cara pasó a la Western Washington University donde obtuvo una licenciatura en Gestión del Ocio.
A continuación, presentamos, a través del testimonio de Cara, una descripción de su trabajo, lo que le gusta, lo que le resulta difícil, las cualidades que considera necesarias para este tipo de trabajo y lo que imagina que hará en un futuro:
Cara Frank, COORDINADORA DE GRUPOS Y LOGÍSTICA
Trabajo en el departamento de administración y programas del Centro de Deportes Adaptados. Me ocupo de la logística, lo que quiere decir que trabajo con el responsable de viajes y organizo todo lo relativo a las actividades de ocio, como son los preparativos de los viajes, los equipos y avituallamientos y la programación de las actividades. Programo los viajes en función de los objetivos y el presupuesto de cada grupo. Me encargo de que dispongamos del permiso necesario del organismo responsable de los espacios libres protegidos, del equipamiento suficiente (como tiendas de campaña, canoas, remos, chalecos salvavidas) y de que haya los monitores necesarios para enseñar a los participantes a descender en rappel, a manejar una bicicleta de montaña o a remar en canoa, por ejemplo. Me ocupo de que todo vaya bien y de que todo el mundo se lo pase en grande. Cuando finaliza la actividad, me aseguro de que todo el mundo regrese a casa sano y salvo.
En estas actividades, hay oportunidades de recibir entrenamiento personalizado, ayudar en la cocina y montar las tiendas, o simplemente hacer amigos. Nuestros participantes son muy diferentes: niños, adolescentes, adultos, personas mayores con discapacidades cognitivas (como autismo o síndrome de Down), personas con parálisis cerebral, esclerosis múltiple, discapacidades físicas, jóvenes víctimas de quemaduras, jóvenes en riesgo social, personas con sordera, ceguera y sordoceguera. A nuestro centro acuden personas de Sudamérica, Europa y muchos otros lugares. A cada persona se le trata como un individuo único, independientemente de las diferencias que se puedan percibir. Se rompen barreras y a las personas se les reconoce por su personalidad y las habilidades que poseen. Muchos de nuestros participantes han sufrido experiencias difíciles y el relato de su vida resulta increíble. Es un honor formar parte de una experiencia que les permite adquirir mayor confianza en ellos mismos.
Todos los que trabajamos en el centro tenemos una mente muy abierta y estamos dispuestos a ayudar. En el Centro de Deportes Adaptados no se tenía una gran experiencia con personas con pérdida auditiva, por lo que les ofrecí una charla sobre el funcionamiento de un implante coclear, el videoteléfono, la manera de comunicarse con las personas que la presentan y lo que representa para mí tener una pérdida auditiva. A todos nos resultó de gran ayuda. La comunicación puede ser difícil porque hay que interactuar con grupos de personas diferentes (clientes de otros países con sus acentos particulares, personas que presentan alguna discapacidad que afecta a la inteligibilidad del habla), así que hay que hacer que todas las personas que participan en las actividades tomen conciencia y darles un toque de atención cuando corresponda (por ejemplo: “¡No te tapes la boca al hablar!”). La clave está en que hay que hacerlo con educación y con sentido del humor para que nadie sienta que ha podido ofender. En ocasiones, pienso que es una cierta ventaja a la hora de establecer una relación con los clientes, que yo tenga también lo que se conoce como una discapacidad ya que a algunos participantes les resulta más fácil relacionarse conmigo que con otras personas.
Hace poco vino un equipo de filmación del programa televisivo “Esta casa es una ruina”, nos envió una familia y formé parte del programa practicando equitación y escalada con la familia. Los padres eran invidentes y el hijo tenía una pérdida auditiva severa. ¡Ahora estoy planificando otro viaje que también se filmará y estoy entusiasmada!
Se trata de un trabajo en el que no todo es un camino de rosas y que te ofrece la oportunidad de participar en experiencias que cambian la manera de ver la vida. Eres testigo de lo que sucede y además en el camino haces buenos amigos. Considero que el puesto que desempeño actualmente es un punto de partida. Trabajo para un director extraordinario y estoy formándome con los mejores profesionales. El Centro de Deportes Adaptados facilita formación y financia [para los empleados] la asistencia a cursos de entrenamiento. Mi objetivo es adquirir mayor formación y experiencia para poder ocupar un puesto diferente cuando llegue el momento oportuno. Me gustaría trabajar en un campamento durante todo el año como supervisora o directora de programas, si surgiera la ocasión me gustaría trabajar como responsable de un campamento educativo para niños con pérdida auditiva que se realizara al aire libre.
Si te interesa mi trabajo, ofrécete como voluntario y consigue buenos contactos y referencias. Aprovecha la oportunidad de hacer prácticas y adquirir experiencia. Defiende tus intereses, céntrate en adquirir y desarrollar habilidades al aire libre, aprovecha las oportunidades de liderazgo y haz valer tus decisiones (incluso cuando, en ocasiones, te toque ser el “malo” de la película). La gente te respetará por tu determinación y por tu propia experiencia. ¡Recuerda que se debe actuar con educación y con sentido del humor!
Las primeras experiencias laborales de Cara fueron peldaños para llegar a su puesto actual:
• Orientadora de campamento y monitora de campistas con discapacidad en diferentes organizaciones, durante el tiempo que estudiaba en el instituto y en la universidad (entre las que se encuentran YMCA (parques y campamentos recreativos y un campamento para personas con pérdida auditiva en Oregón)
• Voluntaria en Australia, recuperando el hábitat de animales oriundos en una reserva.
• Prácticas en Splore (una organización recreativa de Salt Lake City), colaborando en actividades de escalada, camping, senderismo, piragüismo, kayak, esquí con raquetas, esquí de fondo y rafting
• Voluntaria de AmeriCorps(¿scouts?) durante un año (con retribuciones mensuales) en Splore como guía/voluntaria y coordinadora de participación
Además de ser amante de la práctica de actividades al aire libre y una gran atleta, es obvio que Cara sabe trabajar en equipo, tiene una gran capacidad de respuesta y a la hora de asumir responsabilidades, es capaz de desarrollar tareas muy diferentes, recordar todos los detalles, manejar programas informáticos, entablar relación con personas muy diversas y lograr que se sientan cómodas. Ella dice que algunos trabajos no requieren relacionarse con tanta frecuencia y resultan más fáciles para personas que son más introvertidas. Sin embargo, tanto si se es una persona extrovertida o introvertida, su consejo es: “¡Persigue lo que ambicionas!» Para obtener más información acerca del Centro de Deportes Adaptados, Cara le invita a visitar www.adaptivesports.org.