
Las sesiones se llevan a cabo una vez por semana aunque se pueden incrementar o disminuir dependiendo de las necesidades del niño y/o de la familia.
La participación de la familia en la terapia auditivo-verbal al menos de uno de los progenitores, es obligatoria. Ofrecemos un amplio horario que permite conciliar las diferentes obligaciones de la familia y la rutina y actividades de su hijo.
Nuestras instalaciones están diseñadas para que los niños y las familias se encuentren en un entorno cálido, acogedor y acústicamente acondicionado.